Entendemos por pasamanería el género de cosas que se elaboran trenzando o entretejiendo cordones y forrando alambres y botones, como galones, borlas, flecos y demás adornos de oro, plata, seda, algodón o lana, que sirven para adornar telas, vestidos, incluso muebles.
Nosotros diferenciamos pasamanerías en cinta que se venden al corte por metros habitualmente, y lo que llamamos apliques, que son motivos decorativos para la ropa principalmente, también adornados con cordones, rocallas, lentejuelas, o demás abalorios pero que ya están confeccionados de una sola pieza para coser o pegar directamente.
Además de adornar la ropa, podemos utilizar las diferentes pasamanerías para decorar un bolso, unos zapatos, un cinturón o incluso hacernos un adorno para el pelo.
En los tres primeros casos, pegaríamos o coseríamos, según las posibilidades que tengamos, el adorno al complemento aunque existen algunos elementos que nos ayudan a crear lo mismo pero de “quita y pon” como la pinza para zapatos.
Con ésta, pegaríamos el aplique a esta pieza y de ahí al zapato de forma que podemos retirar la pinza y conservar el zapato como era originalmente. Lo que nos sirve, por ejemplo, para adornar un zapato muy cómodo que tenemos pero poco arreglado para la boda a la que vamos a acudir.
En el caso de adornarnos el pelo, deberíamos de buscar primero el tipo de artículo para el pelo que prefiramos: una diadema, un peinecillo, una pinza, etc. Una vez elegido, colocaríamos el aplique bien cosiéndolo o pegándolo o ambas cosas según necesidad. Recordamos que las pasamanerías y apliques podemos encontrarlos TERMOADHESIVOS, en cuyo caso los pegaríamos a la tela aplicándoles calor con la plancha.
Últimamente, existe cierta tendencia en usar las tradicionales borlas o borlones típicos de las cortinas, aunque más finos y estilizados, para los complementos y artículos de bisutería, sobre todo para pendientes.
Por último como curiosidad, comentaremos dos técnicas para la creación de pasamanería: la Frivolité y el Grogrén. La FRIVOLITÉ es una variedad de encaje que conseguimos haciendo una sucesión de nudos y baguillas sobre un único hilo usando una o dos lanzaderas. El GROGRÉN, por su lado, que proviene del francés “gros-grain” ( grano grueso, literalmente), es un tejido con ligamento tafetán acanalado, donde predomina la urdimbre sobre la trama. Se conoce también como “cinta de falla” y se utiliza mucho en sombreros y en las condecoraciones.
Esperamos que os haya sido útil esta entrada y os mostraremos en breve, en video todos los ejemplos de los que hemos hablado aquí…